En junio 2019 con mamá volvimos de un gran viaje ya preparadas para organizar otro: conocer Machu Picchu. Real nos compramos los pilotos en oferta porque hasta ya sabíamos que íbamos a ir en temporada de lluvias (diciembre a marzo).
Yo estaba en un trabajo que cerraba todo enero, y mi mamá también tiene feria por lo cual, enero era el mes, también buscábamos abarcar la mayor cantidad de días posibles gracias a esta cantidad de tiempo libre. En julio 2019 (a mayor anticipación, mejor precio) compramos el aéreo con Aerolíneas Argentinas saliendo el 11 de enero de Buenos Aires – Lima, regresando el 27 de enero haciendo La Paz – Buenos aires = 16 días entre Perú y Bolivia.
Elegimos estar 5 días en Lima, para conocer la capital, probar su famosa oferta gastronómica, hacer un poco de playa, shopping, y lo más importante: hacer la excursión a ICA. Estando ahí nos dimos cuenta que era un montón, en mi experiencia no recomendaría más de 2 días (uno para excursión y otro para recorrer) o evitarla e ir directamente al rico Cusco. Nos hospedamos en una habitación privada de un Airbnb en la zona de Miraflores y nos movimos en transporte público, cambiamos dólares a soles y casi no usamos la tarjeta.
Desde Lima nos tomamos un aéreo Low Cost de Viva Air a Cusco, donde nos hospedamos en un hotel increíble (“Casa Escondida “Chincana Wasi”” – Booking.com) por 4 noches, no usamos transporte público ya que todo queda muy cerca y contratamos todas las excursiones que ya vienen con transporte incluído.
Contraté todo por INKA TOURS, recomiendo 100%, ni media crítica al servicio! Quiero trabajar con ellos, si les escribís avisale que lo viste acá ;).
Fue UN SUEÑO. Pocas cosas más maravillosas, únicas, potentes en el mundo como esta ciudad. Superó cada expectativa, creo que ni las expectativas estaban acorde a la maravilla mundial del espacio, y ni siquiera habíamos llegado al Machu.
¡Simplemente alucinante y más aún para una fanática de la montaña como yo!
En Cusco compramos las entradas para el tren hacia Aguas Calientes (donde se encuentra el MP). Al ser temporada de lluvias, y no ser personas con estado físico, decidimos no hacer el Camino del Inca -la manera más famosa de llegar a MP- ni ahorrar en lo que sale la combi, que además de tardar 6hs necesitas caminar varios kilómetros al pueblo de Aguas Calientes. El tren es la manera más cómoda de llegar, y fue lo único caro que hicimos en todo el viaje, que lo valió 100% ya que es super moderno, con vistas zarpadas, snacks incluídos, wifi y hasta música local… imperdible!! Un LUJO.
Llegamos a Aguas Calientes, nos tomamos el día para descansar, recorrer el mini pueblo y dormir temprano ya que al otro día, era el GRAN DÍA. Nos hospedamos 2 noches en una habitación privada de “MACHUPICCHU GUESTHOUSE” que cumple con las 3B (bueno, bonito y barato).
Elegimos el circuito de WaynaPicchu + ciudadela. Para mi, lo mejor, sin dudas, fue escalar el Wayna, sin palabras. Recomiendo planear con mucha anticipación y proponerse hacer esta montaña, ya que es aún más imponente que el sitio donde van todos (circuitos inferiores). La página oficial es solamente esta https://www.machupicchu.gob.pe/ están los circuitos, precios y disponibilidad.
Desde el pueblo al sitio arqueológico MP subimos en el colectivo (que se compra en lugares muy señalizados) y bajamos caminando. Fue CLAVE subir en colectivo ya que son casi 10km, en nuestro día llovía muchísimo y encima necesitábamos tooooda la energía para poder subir el Wayna jaja, ya bajar, fue más fácil y encima nos hicimos amigos pilarenses.
Días emocionantes, únicos en la historia, como conocer esta maravilla del mundo si los hay. Gracias a la vida y a mi mamá que propuso este destino.
Ese día comimos una hamburguesa gigantesca, nos bañamos, dormimos siesta y a la noche salimos a muchos bares y boliches (!!!) anécdota aparte jaaa. Super resacosas nos tomamos al otro día el tren hacia Cusco para ahí mismo tomar un colectivo que nos llevaría a Copacabana, Bolivia.
Para el recorrido que queríamos hacer en Bolivia, la mejor opción era contratar el famoso bus “hop on off” y comprar un itinerario prearmado. Hicimos:
Fue una genial elección ya que el colectivo es mega cómodo, tiene hasta mantas, cargadores y buen espacio entre asientos. Nos dormimos todo! Bajamos en Puno para ver el lago más largo del mundo, visitamos los Uros y compartimos la mañana con gente que vive ahí mismo, zarpado.
Nos subimos nuevamente al colectivo para bajarnos en Copacabana, donde en el primer día nos instalamos en el hotel (“Utama” – booking.com), comimos una pizza, paseamos por sus calles, Iglesias y nos subimos a un carrito por el lago, salimos a cenar a un lugar muy hermoso donde vimos caer el atardecer.
En el segundo día hicimos excursión hacia la famosa Isla del Sol, también frenamos en Isla de la Luna y sacamos fotos. Ya estábamos muy cansadas y después del resplandor de Cusco, Copacabana nos tenía sin mucha energía, pero caminamos bastante y lavamos la ropa ajaja. Después de dos noches, había que viajar en ese mismo bus, a nuestro último destino.
Llegamos al hotel en La Paz por 3 noches (“Sagarnaga” – booking.com). No sabemos si fue la ciudad, que veníamos viajando demasiado o que somos excesivamente ordenadas que llegar nos shockeó, no nos gustó, nos generó inseguridad y nos costó turistear y adaptarnos. Aprovechamos a descansar, a pasear en todos sus teleféricos y ¡fuimos al cine! Muy genial tener un poco de relax en un viaje así. Comimos siempre en el mismo lugar, ordenamos fotos, visitamos lo que pudimos y cerrábamos todo para volver a Argentina con una aventura inolvidable. Para mi próxima visita a Bolivia quedó el Salar de Uyuni (no nos daba el tiempo ni los altos costos) y el “camino de la muerte” en bici (alguna de las actividades que mi mamá no me dejó hacer jiji).
Escribir este posteo me emocionó y también me cansó, ¡Que manera de recorrer! la verdad, un VIAJAZOO. Aluscinante. Los 16 días anduvimos con un carry on y una mochila grande cada una, medidas perfectas y climas ideales. Voy a armar más posteos detallando cada destino, cada actividad, pero este es el gran pantallazo de un itinerario -modestia aparte- MARAVILLOSO.
Soy muy afortunada.